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Lotec C1000
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El Lotec C1000, es un modelo único creado por un empresario de Emiratos Árabes. Su propósito era poseer el coche más rápido del mundo, y que este fuera exclusivo. Este proyecto se puso en marcha en el año 1995 y ahora se abierto una subasta para su venta.
El noventero Lotec C1000 se subastará a partir del 31 de octubre en la casa de subastas RK, tal fama ha logrado este modelo en tan poco tiempo que se cree que las pujas se situarán alrededor de 1.000.000 de euros.
Se le ha denominado Mercedes Lotec C1000 debido a su motor Mercedes V8 biturbo 5.6 de 1.000 CV de potencia. Esta motorización y su escaso peso de 1.100 kg le permiten alcanzar la velocidad de 431 km/h y realizar el 0 a 100 en 3,2 segundos. Es un logro conseguir todas estas prestaciones en 1995, ya que no solo superaba a cualquier coche de la época en potencia, sino que actualmente tendría las cualidades necesarias para dejar atrás al mismísimo Bugatti Veyron.
El modelo está construido sobre una base de fibra de carbono, no posee tracción integral ni caja de cambio de doble embrague y la transmisión era manual de seis velocidades. Sin embargo aún con todos estos anticuados elementos consigue cifras realmente impresionantes.
El magnate árabe debió desembolsar alrededor de 2,3 millones de euros para su diseño y construcción, sin embargo desde entonces ha sido y es el coche más rápido del mundo que circula por las carreteras.
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El noventero Lotec C1000 se subastará a partir del 31 de octubre en la casa de subastas RK, tal fama ha logrado este modelo en tan poco tiempo que se cree que las pujas se situarán alrededor de 1.000.000 de euros.
Se le ha denominado Mercedes Lotec C1000 debido a su motor Mercedes V8 biturbo 5.6 de 1.000 CV de potencia. Esta motorización y su escaso peso de 1.100 kg le permiten alcanzar la velocidad de 431 km/h y realizar el 0 a 100 en 3,2 segundos. Es un logro conseguir todas estas prestaciones en 1995, ya que no solo superaba a cualquier coche de la época en potencia, sino que actualmente tendría las cualidades necesarias para dejar atrás al mismísimo Bugatti Veyron.
El modelo está construido sobre una base de fibra de carbono, no posee tracción integral ni caja de cambio de doble embrague y la transmisión era manual de seis velocidades. Sin embargo aún con todos estos anticuados elementos consigue cifras realmente impresionantes.
El magnate árabe debió desembolsar alrededor de 2,3 millones de euros para su diseño y construcción, sin embargo desde entonces ha sido y es el coche más rápido del mundo que circula por las carreteras.